martes, 13 de abril de 2021

Hasta que la igualdad se haga costumbre...



“La renovación de la Iglesia es necesaria y urgente para dar respuesta a las necesidades del mundo actual.  Recordamos que en el siglo XIX la Iglesia perdió al movimiento obrero. En el siglo XX a intelectuales y jóvenes. Y es posible que en este siglo XXI pierda a las mujeres, sobre todo a las más jóvenes que  se han alejado de ella por una situación de desigualdad que  no toleran.


Creemos que nuestra reivindicación en favor de la igualdad es un signo de los tiempos. Y que está basada en una experiencia y compromiso de muchas mujeres en la Iglesia de Jesús. También nos basamos en el estudio, investigación y docencia teológicas que han llevado a cabo muchas mujeres en el campo de la Teología Feminista.


Y todo ello lo realizamos desde nuestra conciencia y convicción de ser seguidoras de Jesús. Somos muchas mujeres las que vivimos en la sociedad civil con responsabilidades diversas. Y sin embargo, en la Iglesia somos invisibilizadas. Creemos que esta discriminación está, incluso, en contra de los Derechos Humanos y de la búsqueda de la igualdad y justicia dentro de la propia Iglesia.


Nos gustaría que la Iglesia escuchara este clamor de Dios que habla por boca de tantas mujeres.


Desde la reflexión personal y comunitaria de nuestros grupos hemos elaborado una serie de propuestas que presentaremos en el futuro sínodo de 2022, acompañando a las pocas mujeres que forman parte del mismo, de las cuales sólo una tendrá derecho a voto, y que sólo hace poco tiempo ha sido reconocida dicha posibilidad.


Nos consideremos Iglesia, somos Iglesia, y estaremos aquí gritando “hasta que la igualdad se haga costumbre”. Si nosotras callamos hablarán las piedras.”


Pilar Criado