“Todas las grandes y bellas palabras (libertad, injusticia, igualdad) son susceptibles de ser traicionadas y convertidas en un arma de exterminio. Todas, menos una. La más hermosa que hay en el mundo es compasión, o tal vez prefieras denominarla empatía (hay un prejuicio contra la compasión que yo no comparto).
Es el único de los grandes valores que no puede ser retorcido y utilizado como herramienta de destrucción del prójimo, porque te obliga a ponerte en el lugar del otro. He aquí una pequeña verdad a la que agarrarnos en estos tiempos de tribulación y de mentiras. En un mundo en donde todo parece falso, este concepto simple y obvio es una nuez de certeza irrebatible. Un rincón de luz en el que atrincherarnos para intentar desde ahí mejorar las cosas. Yo no creo en casi nada, pero creo en eso.”
Rosa Montero