“Dejo atrás el miedo,
tu sonrisa me invita
a dar el siguiente paso,
hacia la alta montaña,
o a través del mar,
a disfrutar de este viaje.
Dejó atrás el miedo,
porque tú vas conmigo,
me rodeas con tu abrazo,
susurras que todo está bien
y nacerán las flores, sin duda,
que un día sembramos.
Dejo atrás el miedo,
no cabe en estas alas
de colores recién estrenadas,
siento tu mano, tu luz,
tu suave presencia… y vuelo.”
Esther Fernández Lorente